30.8.11

Reciclando que es gerundio


No, esta foto no está trucada. En Suiza hay un contenedor especial para las capsulas de Nespresso (de hecho existe desde 1991), a través de los cuales la empresa llega a reciclar el 75% de éstas.

Pero algo aún más curioso es el porqué se recicla tanto. Cada suizo recicla unos 360kg de basura al año y un 48% de los desechos urbanos son reutilizados, lo cual es todo un récord si lo comparamos con cifras como España (15%) o Francia (12%). La ley federal obliga a pagar un impuesto sobre los sacos de basura–los míticos de plástico negro–, convirtiéndolos en extremadamente caros. En la suiza francesa sólo el cantón de Friburgo conoce de esta imposición; no obstante estos sacos especiales ya les son familiares a los suizos alemanes.  El Code de l'Environnement (Código del Medio Ambiente) se basa en el principio de pollueur-payeur: aquella persona que no contribuya al cuidado del medio ambiente, deberá pagar la parte proporcional a los daños causados o en otras palabras, si no reciclas, pagas.
Esta práctica no es nueva pues data de 1975 y se aplica al 70% de los habitantes–cada cantón tiene sus propias reglas–.
[Fuentes: Office Fédérale du Gouvernement Suisse, Nespresso's "Econtribution"]

Sólo en mi piso tenemos 6 recipientes distintos para el reciclaje: metal y aluminio, PET, latas, papel y cartón, para desechos orgánicos–con bolsa biodegradable– y desechos no reciclables. Y debajo de casa tenemos los contenedores para papel y cartón, vidrio, desechos orgánicos y desechos no reciclables. Cada 2/3 meses vamos a la déchèterie (foto) para tirar lo que no podemos tirar en estos contenedores.


E igual que ocurre en mi piso, también en la universidad, en festivales de música, en pistas de esquí... te encuentras, al menos, con un contenedor para PET, uno para latas y otro para papel y cartón. Hay una gran conciencia sobre el reciclaje y más de una vez he visto a gente mirar mal o soltar algún comentario si no tiras las cosas como es debido o directamente no reciclas.

Hace unos meses tuvimos una seria discusión sobre el reciclaje en España. Pensamos, ¿qué hubiera pasado si hubiéramos aprovechado el boom inmobiliario para instalar en cada cocina de casa piso y apartamento un agujero para reciclar? Una serie agujeros para cada tipo de desecho que acabaran en un contenedor general para todo el bloque y un sistema de autolavado de tubos. Estoy convencido de que no sólo las cifras de reciclaje aumentarían sino que al mismo tiempo se eliminaría el paseo hasta los escasos contenedores que existen y se educaría a las familias en su propia casa–especialmente a los más pequeños–.

29.8.11

El Swiss Made

El orgullo nacional, otra explicación más de la imagen neutral que recibimos de Suiza.
Este país está orgulloso de su cruz, de su color rojo Pantone 485C–adoptado hace no tanto, en 2007– y de uno de sus puntos fuertes: el swiss made. Concepto inmediatamente ligado con el reloj suizo.


Durante la Reforma Protestante, muchos hugonotes abandonaron Francia debido a las persecuciones, especialmente tras la anulación del Edicto de Nantes (1685) por Luis XIV, poniendo fin a la libertad religiosa y de culto. Estos hugonotes pusieron rumbo a los Países Bajos y Alemania, y muchos de los que se instalaron en Suiza, y más concretamente en Ginebra, eran relojeros o trabajan en la industria.
Por aquel entonces Ginebra era conocida por la joyería. La combinación de ésta con la técnica y experiencia de estos refugiados dió lugar al inicio de la industria relojera suiza que hoy conocemos.
Si bien estos relojes eran copias de modelos franceses e ingleses, los relojes ginebrinos se ganaron una mayor reputación y se supieron vender mejor que el resto, adoptando desde casi el principio una producción orientada a la exportación.
El negocio del reloj motivó el comercio no sólo en Ginebra sino en los pueblos y villas de alrededor, gracias al tipo de la imagen: Daniel Jean-Richard o para que nos entendamos, el John Ford de la industria del reloj. Fue él quien introdujo el sistema de división del trabajo, lo que dió lugar a nuevas máquinas y técnicas.
Si a todos estas circunstancias y hechos le unimos la bonanza del sistema bancario suizo, que data del origen del secreto bancario–allá por la Edad Media–, el resultado es un próspero y potente comercio.


A partir de entonces, todo lo que se fabricaría en Suiza llevaría adheridos estos términos. Adheriendo la imagen de "país de los Alpes" y de "montañas y lagos", nos queda un producto natural, preciso y bien hecho. En otras palabras, un producto de calidad.
Es imposible evitar fijarse en cómo todo lo fabricado en Suiza lleva tatuado la bandera del país, muchas a veces acompañada de frases o eslóganes que refuerzan aún más el producto : "made in Switzerland", "qualité suisse" o "Suisse Garantie". Este estándar nació también durante el amanecer de la relojería suiza: todas las piezas así como el ensamblaje tenían lugar en el país y debía ser incluído en la factura del producto.
Todo esto les permite aumentar el precio, dejando a todos sus adinerados compatriotas orgullosos y satisfechos de sus compras. Pero Suiza es un país pequeño y limitado y aunque dentro esté todo bajo control, hay que exportar este savoir faire por el mundo. Y vaya que si lo hacen.

Los propios suizos son conscientes, por supuesto, de esta máquina marketiniana y echan mano de su patriótico sentimiento para versionar modelos de empresas internacionales. Ocurre con Pfister e IKEA en el terreno de los muebles, con Mx3 y MySpace en el apartado de las redes sociales musicales o convirtiendo lo global en local–como ocurre con McDonald's. ¿Algo más que remarcar? La gran mayoría de estas empresas llevan el rojo y/o la cruz como insignia.
No obstante, grandes empresas suizas como Nestlé, Logitech o Rolex no han seguido esta línea, omitiendo cualquier tipo de huella helvética (a pesar de que en el logo de Logitech haya una línea en un rojo sospechosamente suizo).

A continuación, unas cuantas imágenes que ilustran ese patriotismo; al final, en francés, un minuto sobre la historia de la bandera suiza. 








20.8.11

El transporte de Lausanne... hace un par de telediarios

Esta entrada va dedicada a aquellos nostálgicos de Lausanne, del TL, de los bus pyjama y de la mobilis. O para aquellos que se hayan preguntado por qué el techo de muchas calles de Lausanne están cubiertas por cables...



18.8.11

Cómo funciona la universidad

En esta entrada me centraré en los puntos más importantes que debes saber sobre la universidad en Suiza. Evidentemente puedo hablar que de la UNIL, y más concretamente de las facultades de HEC y Derecho, que son las que conozco de primera mano. Aún así puede aplicarse tanto a otras facultades de la UNIL como de la EPFL; no varía especialmente ;-)

General.
Sobre la universidad tengo que decirte que es dura, hacen currar mucho y sobretodo hay mucha competencia. El hecho de ser Erasmus no sirve de mucho pues, aunque tengas dificultades con el idioma, no debes olvidar que estarás con estudiantes suizos de la parte alemana e italiana, por lo que , básicamente, todos tienen el mismo 'handicap'. Otro dato: la UNIL cuenta con un 20% de estudiantes extranjeros de sus 12006 estudiantes inscritos (datos del 2010) y la EPFL con un 46,6% de sus 8009 estudiantes (datos del 2010). No hay favoritismo que valga.
No puedo contar mucho sobre el primer año ya que yo he cursado asignaturas a partir del 2º año, pero sí que me han llegado noticias de que hacen criba de estudiantes. Me explico: al no existir aquí lo que en España llamamos la selectividad, todo el mundo puede entrar a estudiar cualquier cosa (y como dato curioso, la carrera más cotizada es Medicina). Las plazas, por supuesto, están limitadas, por lo que los estudiantes con calificaciones más bajas... creo que se entiende.

Hay muchos trabajos en grupo por lo que tendrás que trabajar en muchas ocasiones con suizos. ¡Más te vale entender cómo funcionan! 


Exámenes.
Hay dos sesiones de exámenes: en enero y en junio, y no dicen las fechas hasta dos semanas antes del primer examen. Lo cual es, hablando en plata, una putada. Existe la posibilidad de recuperar materias a finales de agosto/principios de septiembre.
Ojo con las inscripciones a los exámenes. Avisan por activa y por pasiva pero siempre hay alguien que lo hace tarde, impuntualidad que se paga en especie: 200CHF.

En HEC no es común, pero en otras carreras como Derecho, Criminología o Psicología predominan los exámenes orales. Éstos consisten en 10 minutos de exposición oral, con 15 minutos previos de preparación. Y algo que alegrará a más de uno: para dicha preparación autorizan utilizar las slides (o similares) que el profesor ha puesto a disposición de los alumnos durante el curso.

En pocas asignaturas te juegas el 100% en el examen final, pues como he dicho antes hay muchas que exigen trabajos y presentaciones (esto último lo adoran. Serás el rey del Power Point o de Prezi) en grupo, por lo que llegas al final con un 40, 50 o 60%. Este porcentaje varía por supuesto según los criterios de la asignatura y/o del profesor.
Los resultados de los exámenes se fijan antes de que éstos empiecen y salen ese día, sin retrasos. A la suiza, vaya.
Las calificaciones son sobre 6 y se aprueba con un 4.

Clases.  
Las clases se imparten en dos formatos normalmente: sesiones de 4 horas con 3 descansos o sesiones de 2 horas con un descanso. La primera clase, como en cualquier universidad, está dedicada a la presentación del profesor y a la entrega de las claves de acceso a la página web de la asignatura o a Moodle–una plataforma universitaria que no todos los profesores utilizan pero los que lo hacen cuelgan slides, tareas, actividades y avisos–.
La asistencia a clase no suele ser obligatoria, pero más vale ir, sinceramente.

Profesores.
La calidad del profesorado es, en general, muy buena. Hay profesores de toda Suiza pero sobretodo muchos extranjeros. Te toparás con todos los acentos en francés e inglés posibles.
Todos suelen ser bastante accesibles salvo cuando se trata de "eminencias académicas", véase profesores de business schools o CEOs, que reparten su tiempo entre sus quehaceres y la universidad.
Todos los profesores tienen asistentes que generalmente suelen ser estudiantes. Es a ellos a quienes deberás dirigirte para inscribirte a la asignatura, a algún grupo de trabajo o plantear dudas de índole administrativa.


16.8.11

El dinero no lo es todo






Ultimamente no paro de tener conversaciones sobre el savoir faire de esta gente, en conversaciones mantenidas con los propios suizos. Poco importa si vienen del Ticino, del Röstigraben o de la Romandie: todos quieren que les digas cómo ves a Suiza y a ellos. Uno podría pensar que lo preguntan porque les encanta oír cosas buenas de su país–y siendo objetivos, hay más cosas buenas que malas–, sin embargo están totalmente en contra de ellos mismos. Identifican perfectamente y rechazan sus puntos débiles.
Me explico.
Hay tres cosas que se podría reprochar a Suiza y por supuesto a sus habitantes: ambiente, rectitud y dinero.
El ambiente y la rectitud van de la mano. Su a veces excesiva educación impide muchas veces la comunicación y el contacto humano. Existen unas líneas establecidas de las que no osan despistarse. Los españoles nos saltamos esas fórmulas, lo que nos permite ser más abiertos y accesibles. Hay más actitud para la improvisación.
En la rectitud incluiría también la xenofobia. Pero no son racistas. Simplemente es una relación de amor/odio con los extranjeros pues los necesitan y forman parte de su sociedad (aproximadamente 2 millones de extranjeros viven y trabajan en suelo helvético, representando el 20% de la población total). No obstante, se plantean el frenar su llegada por motivos de seguridad y de calidad.
Como buen país desarrollado que es, los necesitan en términos de de natalidad para evitar el sabido envejecimiento, y de empleo pues existen ciertos puestos y sectores económicos que los nacionales no están dispuestos a cubrir. Asimismo los necesitan en términos pecuniarios.
Para que nos entendamos: los suizos quieren el dinero de los extranjeros pero prefieren que no se queden, que lo dejen a distancia.
Como bien explican muchos, Suiza es un país enriquecido con el dinero de personas de toda calaña: aceptaron el dinero y el oro de los nazis, así como el de los judíos (muchos de los cuales fueron entregados a las autoridades alemanas) para, después de la guerra, declararlo como "sin dueño". Aprovisionaron con armamento a las potencias del Eje y hoy lo hacen a Egipto y Arabia Saudí. 
Es innegable la impecable manera en la que gestionan todo este dinero y en general sus escasos recursos, pero algo más emborronada la manera en la que lo adquieren.
Su neutralidad no les hace levantar sospechas.

 Así queda repartido el dinero en los bancos suizos. Fuente: KPMG.

Si todos los jóvenes helvéticos de ahora se quejan o critican sus cuadriculadas maneras y su mejor activo, ¿cómo será Suiza dentro de 10 años? ¿Se latinizarán como parecen querer hacer?

14.8.11

Novatos del alojamiento, ¡escuchad!

Artículo I. Del vagabundo.
Si aún no tienes tu cuenta para loguearte en la universidad, manda un email a logement@unil.ch con tu nombre, estudios y tipos de alojamiento que deseas buscar. Recibirás cada día un updated PDF con una lista de alojamientos sacados de la base de datos de la UNIL y EPFL.

Artículo II. Del vagabundo con dinero.
Durante tu estancia en Lausanne, sin techo propio, tienes varias opciones: buscar a gente por Facebook y/o Couchsurfing para pedir que te dejen alojarte por unos pocos días o reservar en el Youth Hostel o en el Lausanne Guest House.

Artículo III. Del novato ya inscrito.
Una vez recibas de la UNIL o EPFL  tu nom d'utilisateur y mot de passe– lo que viene siendo cuenta y constraseña–, podrás acceder directamente a la base de datos de alojamiento.

Alea jacta est.





12.8.11

Utilizar Spotify, ya no es tarea complicada

Noviembre 2011. No eliminaré el contenido de esta entrada para que quede constancia de las pericias que teníamos que hacer para escuchar música en streaming en Suiza. Pero es que ahora, mira lo que pasa. ¡Spotify ya se escucha en Suiza! Se han hecho los neutrales durante un tiempo, cómo son ellos.

El uso de Spotify está restringido en Suiza por lo que tenemos varias opciones:

  • Al no poder iniciar Spotify desde una localización geográfica que no entre en su red, la única posibilidad es compartiendo la cuenta con alguien en España (en mi caso); de este modo al iniciar sesión desde allí, se puede utilizar en Suiza. Si no se inicia sesión en el periodo de 15 días desde España, en Suiza no se podrá usar Spotify.
  • Abrirse una cuenta gratuita durante tu estancia en el extranjero a través de Cocotify. El funcionamiento es bastante sencillo: localizan la cuenta en uno de los países en los que se puede utilizar Spotify, como si tu amigo/a se conectara desde España cada poco tiempo para que no caduque.
  • Acudir a las radios digitales, como Stereomood (según los estados de ánimo) o Rockola.fm
  • Quién sabe si este año o al siguiente estás leyendo esto y Suiza abre sus orejas a Spotify o Deezer. En cualquier caso, en la página de esta última advierten de su pronto lanzamiento.
  • ¿La mejor opción? Si no queremos andar con líos, GrooveShark tiene un catálogo incluso más extenso que Spotify y viene de perlas para hacer listas de reproducción para fiestas.


Prohibido tocar

11.8.11

Irse de banking

Irse de banking o banquear hace referencia a las excursiones que uno se hace de vez en cuando en Suiza para ganar dinero. Sí, ganar. Durante todo este año he vivido varias subidas y bajadas en cuanto a la relación entre el € y el CHF. Llegué a Lausanne con 1.28CHF = 1€ y parece que con el desplome de la Bolsa me iré en la paridad.

En estos días, cada vez que tomo un billete de 20 o 50 francos pienso en 20 o 50 euros. El franco se refuerza y eso me mola (no tanto como a Nestlé).

Le Corbusier es el del billete de 10.-

3.8.11

Las terrazas de Lavaux

Lavaux, 1ª etapa vuelta al lago Léman, julio 2011 J.Elízaga.

Sin duda uno de mis sitios preferidos no sólo de Vaud si no de Suiza entera. 32km de viñedos,  terrazas y pueblecitos con mucho encanto.
El mejor modo de recorrerlos es en bici. Saliendo desde Lausanne, pedalea dirección Montreux hasta Lutry. Una vez pasado Lutry, por lo que parece una carretera nacional (provista con carril bici), un tunel de lavado (pincha en la imagen para ampliar) da la salida hacia la izquierda para subir hacia las terrazas, por la route de la Petite Corniche.


A partir, el goce es máximo, así como las cuestas. Pero aseguro que las vistas y el paisaje hacen que casi se te olvide que estás pedaleando. Pasarás por pueblos como Epesses, Rivaz o St Saphorin, auténticas pueblecitos con aires de Provenza francesa. Tómate un descanso en cualquier piedra para disfrutar de una de las mejores combinaciones gastronómicas que jamás he probado: vino blanco de Lavaux y Gruyère.
La época ideal para recorrerse las terrazas es a partir de verano, cuando los viñedos están verdes. O a principios de otoño, durante la vendimia. En noviembre, aunque más triste, toma este aspecto:


Y para finalizar indicar, por poner etiquetas, que estas terrazas son Patrimonio de la UNESCO desde el 2007.

2.8.11

Sitios que no visitar en Suiza

Me gustaría compartir con los próximos visitantes de Suiza varios rincones que no recomiendo visitar, por una cuestión de tiempo, dinero y esfuerzo.

Debo empezar por algo conocido por muchos: el castillo de Gruyères. Es una verdadera castaña de castillo y en su interior no hay nada salvo exposiciones que nada tienen que ver con la historia del mismo. Si hay algo bonito en este monumento es su localización y el castillo en sí, pero su interior decepciona, agota y confunde. Más te vale ahorrárte los 8CHF de la entrada (precio estudiante) en un buen queso Gruyère semi-salé.


El lago subterráneo más grande de Europa, le lac de St-Léonard, está en el cantón de Valais, cerca del precioso pueblo de Sion. El precio de la entrada, como en el caso del castillo de Gruyères, no es un impedimento (10CHF). No obstante, la cola que hay que hacer hasta entrar (calcula una hora desde que compras el billete) y el tontódromo que han montando a la entrada del lago (lugar de reencuentro de guiris, postales y navajas suizas) echan realmente para atrás. Antes de entrar ya te sientes medio estafado. A esto le sumamos la visita en sí: 30 minutos en una barca para veinte personas, peces importados de otros lagos e innecesarias explicaciones de las sombras que crean los miles de focos que han colocado en las paredes de la cueva. Los primeros minutos de la visita son interesantes, pero a partir del tercer remazo se ve que no había mucho más que contar.
Dedica mejor la hora y media en hacer un pic-nic en las terrazas vinícolas que dan al Ródano o visitando Sion.

Lo siguiente nada tiene que ver con el turismo. Se trata de una tienda de venta y reparación de bicis de Lausanne. Desconozco los verdaderos skills del proprietario en cuanto a bicicletas, pero su tacto con el cliente deja mucho que desear. Prepotente, nada servicial y con los precios por servicio más caros que he visto en un año en Suiza. Lo siento por su negocio, pero debo hablar de él en sentido estríctamente negativo. Su tienda está ubicada en la Avenue Recordon, así que si pinchas, sólo tienes que bajar una centena de metros por la misma calle hasta Galicien, donde hay una tienda de bicis a 2 metros de la parada del bus 18 ;)

¿Alguien quiere compartir una mala experiencia helvética?